Acontinuación se muestra el trabajo de lectura de los estudiantes del primer grado grupo 3 de la PREPARATORIA OFICIAL NUMERO 38 "ANDRES MOLINA ENRIQUEZ" Esperando que el contenido sea de su agrado.......
viernes, 8 de junio de 2012
jueves, 7 de junio de 2012
PROPÓSITO
Este libro muestra el lado más oscuro que una
familia puede esconder detrás de todas las cortinas de la hipocresía y mentira
que suponen ser una falsa alegría para todos sus miembros que la conforman,
pero en sí ese es el peor camino que uno puede escoger porque poco a poco vamos
acumulando rencores que en algún momento explotarán y desencadenarán
consecuencias tan graves que estarán fuera de nuestras manos para poder
enmendarlas.
Esta es la gran y penosa realidad de algunas de las
familias, pero ese no es el problema principal, la necesidad radica en no
buscar soluciones que permitan reencontrar el camino perdido. Y es así de donde
nacen los problemas más comunes que se ven en nuestra sociedad, especialmente
en los jóvenes. Buscamos refugio en los vicios más miserables como la
prostitución, las drogas y el alcohol; actos ilícitos como el robo, hurto,
secuestros y violaciones; y maltratos tanto físicos como psicológicos que nos
dan un escape a nuestros problemas así sea por cinco segundos, pero en realidad
más nos estamos hundiendo, en nuestra propia miseria, sin darnos cuenta.
Desde la adolescencia la comunicación entre padre e
hijo ha ido desapareciendo, casi no hablamos con nuestros padres, y si eso
sucede, es solamente para escuchar regaños o insultos, o herir con palabras,
que molestan demasiado a tal punto que varias veces derramamos lágrimas a causa
del pleno dolor que es ver que tu ser querido mate tu espíritu de esa forma tan
cruel. Eso lleva a tener vidas completamente separadas, aún viviendo bajo el
mismo techo, cada uno viviendo su mundo, sin que exista la relación familiar
que es la que debería de prevalecer. Este es el vivir diario y es expuesto y
reflejado en unas cuantas palabras dentro de este libro, pero que al volverlas
a leer, nos damos cuenta del daño que estamos haciéndonos. El no
tener tiempo, ya sea por el trabajo de los jerarcas del hogar o por simple
flojera, hace nacer todos los problemas con los que convivimos, y a la vez se
transforman en necesidades del hogar y se reflejan en la actitud y trato que
damos a las personas con quienes nos relacionamos día a día o en cualquier
circunstancia, pero en ocasiones no es tan visible como aparenta serlo.
Existen personas que saben esconder sus verdaderas
actitudes disfrazándolas con actitudes carismáticas, esto es lo que no debería
existir, porque no mostramos quiénes somos en realidad y de esta manera
guardamos nuestras alegrías, tristezas y problemas y gran error hay en ello,
puesto que no damos señal de falencias que en algún momento las personas con
quienes vivimos nos puedan ayudar. Estamos rodeados en un mundo lleno de
mentiras y a partir de ellas es donde destruimos las vidas de las demás
personas, incluyendo nuestra familia. Pero toda problemática familiar radica en
la pésima relación entre la pareja de esposos. Ellos son los principales
responsables de nuestra formación mala o buena; porque la formación más
importante del ser humano nace del hogar; además esta novela nos enseña a
nosotros como hijos a saber que nuestros padres no son perfectos, no nacieron
siendo padres, realizan su papel como mejor pueden y todo lo que ellos hacen
por nosotros siempre es para nuestro bien, si fuese el caso que existiera un
mal entendido o discrepancia lo mejor es la comunicación, no hay nada mejor que
dialogar, con calma y paciencia y solucionar los problemas, sin llenarse de
coraje, ya que siempre hay que saber escuchar, así aprendemos a convivir en paz
y armonía a pesar de nuestros defectos, de todas formas todos cometemos
errores, nadie, absolutamente nadie es perfecto.
Esta obra es un llamado y protesta a la disfunción
en el núcleo familiar provocado por factores internos quienes los culpables son
los padres y los hijos que en algún momento han dado paso a que la falta
de comunicación, los vicios, el maltrato físico y emocional hacia los hijos y
otras personas creen un punto de ebullición en el que la persona no pueda
soportar más los sentimientos malos que lo único que provocan es consecuencias
desastrosas, como lo que ocurrió en la obra literaria.
También es un ejemplo para las familias de lo que puede pasar si no
aprenden a comunicarse, a superarse, a mantenerse unidos, a apoyarse mutuamente
sin esperar nada a cambio. Ya que Hoy
la familia está viviendo una crisis de valores, se agudiza la desintegración,
la violencia intrafamiliar, se incrementa la mentalidad del ser humano como
objeto desechable, el individualismo y el egoísmo son parte de la persona. Lo
que menos tienen las parejas, los matrimonios, es la comunicación. Por el
contrario ahora se vive la apatía por la pareja, se vive en la indiferencia y
por consecuencia en el vacío existencial. Lo peor es que en las parejas existen
resentimientos, soberbia, falta de confianza, ahora la infidelidad toca
insistentemente a las puertas de los hogares. Y todo esto debido a la
fragilidad creciente de los matrimonios.
A todo lo anterior debemos añadir, que no raras veces el hombre y la mujer, buscando respuestas, cierto apoyo y comprensión a sus problemas cotidianos y graves de sus vidas en pareja y familiar, se les ofrezcan propuestas seductoras de falsa felicidad.
A todo lo anterior debemos añadir, que no raras veces el hombre y la mujer, buscando respuestas, cierto apoyo y comprensión a sus problemas cotidianos y graves de sus vidas en pareja y familiar, se les ofrezcan propuestas seductoras de falsa felicidad.
En conclusión, el libro es un gran ejemplo de
superación para las familias que pasan por una terrible situación de desunión
debido a la falta de comunicación. Se debe ejercitar la sensibilidad en el
dolor para que, gracias a dolorosas desgracias, se logren una paz desconocida.
Un problema no es el origen de un fin ni una tragedia atroz, al contrario, es
una señal para que aprendamos de ese tropiezo y asimilemos el mensaje enviado y
sigamos adelante con alegría.
El contenido del libro deja muy buenas reflexiones
por parte de las numerosa citas textuales pero considero que lo más importante
que trata de transmitir esta narración es que la base de la familia es la
comunicación y que sin la comunicación nada es posible porque en el seno del
hogar es donde se encuentran todos los valores que necesitan los hijos para
crecer y los padres para ser mejores viendo a sus hijos ser buenos hijos , me
parece excelente la participación de Gerardo porque gracias a él resurgió su
familia , es decir que si nosotros vemos que algo no anda bien en nuestro hogar
debemos actuar porque todo cambie y sea mejor pero todo eso se basa en la
comunicación . Me parece una excelente y muy conmovedora historia de superación
familiar.
El libro es válido en razón de que está escrito con
una sencillez de lenguaje que lo hace inteligible para una cantidad amplia de
lectores, sin importar la variedad de léxico que estos posean. No
necesariamente esto implica que esté escrito sin tener una dosis de
conocimientos relevantes, de hecho es importantísimo señalar que hace una
excelente síntesis de normas y preceptos bíblicos acerca la relación entre
padres e hijos, los cuales son realzados como Máximas Morales. Para una persona
con problemas familiares serios es una lectura gratificante.
La verdadera recomendación se la extiende a los
padres, que de una forma u otra son los que más influyen en la formación de los
futuros hombres. Una obra que a través de sus páginas se van suscitando una
serie de eventos los cuales te van conmoviendo y te hacen reflexionar sobre tu
papel como padre y también como hijo.
La familia es la sociedad más importante, por lo
que se debe cuidar mucho y aprender a convivir con ella, para ello se debe
seguir un conjunto de reglas y normas de ética y moralidad. En esta obra
aparecen conceptos muy buenos de superación para la familia y, también, de
superación personal. Esta obra nos enseña que debemos respetar nuestra familia
y a nosotros mismos, que los padres deben ser responsables y nosotros debemos
entenderlos.
La única energía que fortalece verdaderamente al
hogar y a cada uno de sus miembros es el amor sin condiciones". Porque
debemos apoyar a los hijos en cada momento; cuando triunfen, cuando se
equivoquen, cuando estén tristes, cuando estén alegres, en fin, en cada
oportunidad que sea posible.
* "Los hijos cargarán en el subconsciente
muchos años los patrones de conducta que observaron de sus padres".
Esto es muy cierto, ya que los hijos aprenden lo
que ven de sus padres; si sus padres son violentos frente a ellos, aprenderán a
golpear a los además, etc.
Formar y ser parte de una familia es un reto
constante, tanto para los padres como para los hijos, pues a medida que van
pasando los años y los niños se convierten en jóvenes y luego en adultos. Las
situaciones dentro del entorno familiar también van cambiando y alcanzar la
solidez familiar es una labor diaria, no es una meta a la que se llega y con
ello alcanzamos el éxito final, sino que es un constante vencer a las actitudes
negativas, a los factores que atentan contra los valores, a las amenazas de los
entornos perjudiciales, incluso, vencer nuestras propias malas actitudes que no
benefician nuestro interior ni las relaciones con los demás.
Ser hijo tampoco es sencillo… convertirse de un
niño pequeño a un jovencito que experimenta una serie de cambios y dudas
respecto a la vida y el propósito que tenemos en ella, sobre sí mismos, abrirse
a un nuevo mundo el cual se observa con otros ojos, distintos a los de la
niñez… puede ser abrumador e intimidante. Y de ahí pasar a un adulto de quien
se espera que viva acorde a los buenos valores inculcados, sumados a las metas
personales en todos los sentidos, puede también ser motivo de tensión y estrés.
En medio de todas esas inquietudes, también hay muchas vivencias que opacan
esos sentimientos, las que nos retornan a la infancia, a la juventud, a la
convivencia en familia, a los momentos felices y alegres con los padres.
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